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¿Qué es la biomasa? Ventajas y Tipos

¿Qué es la biomasa? Ventajas y Tipos

Imagina que cada residuo orgánico que producimos diariamente pudiera transformarse en energía; y no solo cualquier energía, sino una fuente renovable. Esto es precisamente lo que representa la biomasa: una alternativa energética que convierte diversos tipos de desechos en un combustible renovable, con un impacto neutro en términos de emisiones de CO2 y con una alta competitividad en el mercado.

¿Qué es la Biomasa y cómo se obtiene?

La biomasa se distingue por su diversidad, manifestándose en distintas formas: desde residuos agrícolas como los rastrojos, forestales derivados de la limpieza de montes y cuencas de ríos, hasta agroalimentarios como los residuos de la industria ganadera o aceite industrial, e incluso la materia orgánica que nosotros, los seres humanos, generamos y desechamos.

De acuerdo con la Directiva Europea de Energías Renovables, la biomasa se define como la porción biodegradable de productos, residuos y desechos de origen biológico de actividades agrícolas, sustancias vegetales y animales, silvicultura, y las industrias relacionadas, incluyendo la pesca y la acuicultura. También abarca la fracción biodegradable de residuos industriales y municipales de origen biológico.

La madera es el recurso más aprovechado en la producción de bioenergía, ya sea en forma de pellets, astillas, briquetas, serrín o leña. Gracias a la combustión de estos materiales orgánicos se puede obtener calor, combustibles y electricidad. En países como España, bendecidos con un entorno natural rico y una amplia producción agrícola y ganadera, la biomasa representa una excelente noticia. La abundancia de materias primas facilita enormemente el acceso a los recursos necesarios para su producción energética.

Aprovechamiento de la Biomasa

El aprovechamiento de la energía de la biomasa es versátil, ya que puede transformarse en calor, electricidad o combustibles. Esta flexibilidad permite su uso en contextos variados, desde aplicaciones domésticas, como el calentamiento de agua en la caldera de una casa o un edificio, hasta implementaciones industriales en grandes plantas de biocombustibles.

La producción de energía a partir de la biomasa se clasifica en dos categorías principales:

Métodos Termoquímicos

Estos métodos involucran la transformación de la biomasa mediante el uso del calor, siendo particularmente efectivos con materiales de bajo contenido de humedad. La energía se genera a través de procesos como la gasificación, la pirólisis y la combustión directa, donde el calor descompone la biomasa en componentes más simples o la convierte directamente en energía.

Métodos Bioquímicos

En estos procesos, se emplean microorganismos específicos capaces de degradar las moléculas de materia orgánica. Son ideales para materiales con alto contenido de humedad. A través de la digestión anaeróbica o la fermentación, estos métodos transforman la biomasa en biogás o bioetanol, aprovechando la actividad biológica para la producción de energía.

Tipos de Biomasa

La biomasa, como fuente de energía renovable, puede clasificarse en tres categorías principales basadas en su origen y método de producción:

  • Biomasa NaturalEsta categoría incluye la biomasa que se forma en la naturaleza de manera espontánea, sin intervención humana. Proviene directamente de plantas, árboles y otros organismos que acumulan energía solar en forma de materia orgánica.
  • Biomasa ResidualSon los residuos orgánicos generados por las actividades humanas. Esto incluye desde los residuos sólidos urbanos (RSU) hasta los derivados de procesos agrícolas, ganaderos e industriales. Según su composición, esta biomasa puede subdividirse en húmeda o seca, ofreciendo diferentes potenciales de aprovechamiento energético.
  • Biomasa de Cultivos EnergéticosSe refiere a los cultivos plantados específicamente para ser utilizados como fuente de energía. Estos cultivos se seleccionan y gestionan con el objetivo de maximizar la producción de biomasa utilizable para la generación de energía, como biocombustibles o para la producción directa de calor y electricidad.

Ventajas de la Biomasa

  • Sostenibilidad, Rentabilidad y Accesibilidad

    La biomasa se caracteriza por una alta disponibilidad de materias primas, lo que facilita un aprovechamiento eficiente y contribuye a la conservación de espacios naturales. Su utilización no solo es sostenible desde el punto de vista ambiental, sino también rentable y accesible económicamente.

  • Promoción de la Economía Circular

    La biomasa juega un papel clave en la economía circular, transformando los residuos generados en recursos útiles, como el uso de cenizas como fertilizantes agrícolas. Este ciclo virtuoso minimiza el impacto ambiental y fomenta un uso más eficiente de los recursos.

  • Generación de Empleo Sostenible

    La industria de la biomasa contribuye significativamente a la creación de empleo, ofreciendo oportunidades laborales en la gestión, recolección y procesamiento de materias primas, así como en la operación y mantenimiento de instalaciones de energía. Esto es especialmente relevante en zonas rurales, donde puede ayudar a combatir la pobreza energética y fomentar el desarrollo local.

  • Reducción de la Dependencia de Combustibles Fósiles

    La biomasa ofrece una alternativa real para reducir la dependencia de los combustibles fósiles, especialmente en sectores donde la descarbonización presenta mayores desafíos, como el transporte de vehículos pesados y la aviación. Su uso contribuye a una transición energética más limpia y sostenible.

Usos de la energía de la biomasa según su origen

La biomasa, gracias a su rica variedad de materiales orgánicos, se presta para la producción de energía en múltiples formas, variando según su origen.

  • Producción de Biocombustibles (biodiésel, biojet, etc.)

    • Biocombustibles de Primera Generación: Estos se derivan de cultivos agrícolas destinados a la alimentación, como los aceites vegetales.
    • Biocombustibles Avanzados o de Segunda Generación: Se producen a partir de residuos de cultivos, industrias alimentarias, residuos urbanos y cultivos agroforestales no alimentarios. Incluso, algunas plantas acuáticas y algas con alto contenido de aceite muestran un gran potencial energético. Además, se investiga la mejora en la captura y almacenamiento de CO2 mediante la modificación genética de microorganismos.

    Entre los biocombustibles más comunes se encuentran el bioetanol y el biodiésel, aunque surgen alternativas como el hidrobiodiésel (HVO) y el biojet (SAF).

  • Producción de Biogás

    El biogás, compuesto mayormente por metano y dióxido de carbono, resulta de la descomposición anaerobia de materia orgánica. Proviene de residuos ganaderos, agroindustriales, lodos de depuradoras y desechos domésticos, y se emplea principalmente para la generación de energía térmica y eléctrica, con potencial futuro para su inyección en la red de gas natural.

  • Producción de Energía Térmica (calefacción, pellets, etc.)

    La combustión directa en calderas, estufas de pellets, hornos o chimeneas permite la generación de energía térmica, utilizada en la industria para producir vapor o en climatización y agua caliente sanitaria.

  • Producción de Energía Eléctrica (centrales de biomasa)

    La biomasa quemada en calderas genera vapor, que a su vez impulsa turbinas para producir electricidad, con capacidades que pueden alcanzar hasta 50 MW.

 

Ernesto Correa Díaz

Ingeniero Técnico de Obras Públicas y apasionado de las energías renovables hasta el punto de crear mi propia empresa. Especializado en el estudio y dimensionamiento de obras, autoconsumo fotovoltaico, sistemas de calefacción con energías renovables.

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